‘viremos como árquides’: las fronteras de la tierra y la conversación de alturas
Se trata de escuchar, no de fisgonear. No me interesan los chismes, ni las confidencias, ni los dramas personales, sino los acentos. Voy escuchando conversaciones de la gente, pero siempre atento a cómo hablan, no a lo que cuentan. Engrasa…